3 «¿Qu¨¦ tienes, reina Ester?» le pregunt¨® el rey. «P¨ªdeme lo que quieras; aunque sea la mitad de mi reino, te la dar¨¦».
4 Ester respondi¨®: «¿Aceptar¨ªa el rey venir hoy, junto con Am¨¢n, al banquete que le tengo preparado?» 5 El rey dijo al momento: «Vayan r¨¢pido a buscar a Am¨¢n y hagamos lo que Ester nos pide».
5 Fue pues el rey con Am¨¢n al banquete que hab¨ªa preparado Ester.
6 Cuando le serv¨ªan el vino, el rey dijo a Ester: «¿Qu¨¦ pides? Lo que sea se te conceder¨¢. Dime lo que deseas, aunque sea la mitad de mi reino, se te dar¨¢».
7 Ester respondi¨®: «¿Preguntas por mi solicitud y mi deseo?
8 Si el rey me quiere conceder un favor, si el rey estima conveniente satisfacer mi pedido y mi deseo, que venga el rey una vez m¨¢s con Am¨¢n a la comida que le preparar¨¦ mañana. Entonces dar¨¦ mi respuesta al rey».
9 Ese d¨ªa sali¨® Am¨¢n feliz y contento. Pero al ver en la puerta del rey a Mardoqueo que no se par¨® ni se cuadr¨® ante ¨¦l, se llen¨® nuevamente de rabia contra Mardoqueo.
10 Sin embargo se domin¨® y regres¨® a su casa; mand¨® llamar entonces a sus amigos y a su mujer Zer¨¦s.
11 Am¨¢n les cont¨® en detalle su incre¨ªble riqueza, el gran n¨²mero de sus hijos y todo lo que el rey hab¨ªa hecho para elevarlo y ponerlo por encima de todos los funcionarios y de todos los servidores del rey.
12 Y Am¨¢n añadi¨®: «La reina Ester no ha invitado a nadie m¨¢s que a m¨ª al banquete que prepar¨® para el rey, y mañana tambi¨¦n he sido invitado por ella junto con el rey.
13 Pero todo eso es nada para m¨ª mientras vea a Mardoqueo, a ese jud¨ªo, sentado en la puerta del rey.»
14 Su mujer Zer¨¦s y sus amigos le dijeron: «Manda instalar una horca de veinticinco metros de alto y mañana pide al rey que ahorquen ah¨ª a Mardoqueo. As¨ª estar¨¢s de buen humor para ir al banquete con el rey». Am¨¢n acept¨® su consejo y mand¨® levantar la horca.