Iremos a la casa del Señor.¡ªHimno de
entusiasmo y alegr¨ªa del peregrino al llegar al Templo de Jerusal¨¦n.
Admiraci¨®n del edificio. Orgullo al ver acudir las muchedumbres. Y algo
todav¨ªa m¨¢s profundo: una experiencia de convivencia con otros creyentes.
1 Me puse alegre cuando me dijeron:
1 «¡Vamos a la casa del Señor!»
2 Ahora nuestros pasos se detienen
2 delante de tus puertas,
Jerusal¨¦n.
3 Jerusal¨¦n, edificada cual ciudad
3 en que todo se funde en la
unidad.
4 All¨¢ suben las tribus,
4 las tribus del Señor, la asamblea
de Israel,
4 para alabar el Nombre del Señor.
5 Pues all¨ª est¨¢n las cortes de
justicia,
5 los ministerios de la casa de
David.
6 Para Jerusal¨¦n pidan la paz:
6 «¡Que vivan tranquilos los que te
aman!
7 ¡Que la paz guarde tus muros
7 y haya seguridad en tus
palacios!»
8 Por mis hermanos y por mis amigos
8 quiero decir: «¡La paz est¨¦
contigo!»
9 Por la casa del Señor nuestro
Dios,
9 pido para ti la felicidad.